La pandemia de COVID-19 tensó significativamente a una industria aseguradora que ya venía experimentando una tibieza global de crecimiento en los últimos años; por lo que las empresas que hoy pretendan crecer sostenidamente necesitarán enfocar su estrategia mediante la reasignación activa tanto de su capital como de su talento, distribuyendolo en una especie de “tablero de ajedrez”, donde cada punto propicie el equilibrio y crecimiento rentable a corto y largo plazos.
Es la conclusión a la que llega McKinsey & Company en su documento Cómo alimentan los líderes el crecimiento rentable en seguro, el cual agrega que tal afirmación obedece a que de 2010 a 2019 las primas globales solo crecieron 3 por ciento y la participación de la industria en la economía mundial permaneció estancada en aproximadamente 7 por ciento; en tanto, en algunos casos experimentaron disminuciones en las primas netas ganadas, mientras que la industria logró un crecimiento de dos dígitos.
Con base en dicho panorama, McKinsey elaboró un estudio de análisis y desempeño de 2008 a 2018, donde 46 aseguradoras en todos los mercados y líneas de negocio identificaron el origen de su crecimiento y ponderaron dónde podrían encontrarse en el futuro. La consultora descubrió que los mejores resultados estuvieron correlacionados con la reasignación activa del capital y talento.
Asimismo, la consultora global destaca que se concentraron en hacer crecer sus principales líneas de negocio y no tanto en lanzar nuevos productos. Mediante esta fórmula, las aseguradoras que así lo hicieron advirtieron un crecimiento de entre 80 a 90 por ciento más rápido que el de sus pares.
Por otra parte, el lanzamiento de nuevos negocios es atractivo por varias razones, entre ellas, se fomenta la construcción de nuevas capacidades, se hacen ajustes de cartera o se incursiona en la búsqueda de nuevas fuentes de crecimiento en un horizonte de tiempo más largo, advierte la firma.
McKinsey & Company detectó que tres cuartas partes del crecimiento de primera línea de una empresa se logra mediante la captura de los mercados en crecimiento conocidos como sus segmentos, por lo que las que entregaron un incremento superior al promedio en su negocio principal fueron aquellas que estaban mejor posicionadas que su competencia mediante segmentos de mercado de crecimiento más rápido.
Hacer realidad un crecimiento descomunal de las aseguradoras requiere que éstas hagan un ejercicio de reasignación de recursos tanto de capital como de talento, o al menos afirmar activamente sus asignaciones de recursos actuales. Sin embargo, la mayoría de ellas no trasladan los recursos de manera significativa de un año a otro.
McKinsey & Company señala que los reasignadores dinámicos de recursos pueden ganar alrededor de cinco o más puntos porcentuales de Tasa de Retorno Sintético (TRS) cada año en comparación con bajas reasignaciones.
Durante esta época de crisis, los directores ejecutivos de seguros deberían duplicar las oportunidades para hacer crecer su núcleo empresas. Esta tarea implica identificar bolsas granulares de tamaño descomunal y realineación de sus enfoques estratégicos para capturar este incremento.
Finalmente, la firma refiere que las aseguradoras también deben asignar una cantidad medida de recursos para escalar a las empresas emergentes, cultivar nuevas ideas para crear crecimiento futuro y gestionar el riesgo de interrupciones. Aquellos que lo logren no solo sortearán la crisis actual, sino que superarán a los competidores.