Cuando llega la temporada de lluvias, la ciudad se transforma: los trayectos se alargan, el tráfico se intensifica y manejar exige más atención. Aunque el cambio de clima es parte del día a día, también lo
es estar preparado.
De acuerdo con la Secretaría de Movilidad de la CDMX (Semovi), los tiempos de traslado en temporada de lluvias pueden aumentar hasta un 50 por ciento, mientras que las emergencias viales por fallas mecánicas y accidentes también registran picos considerables.
La combinación de pavimento mojado, baja visibilidad y mayor densidad vehicular vuelve indispensable contar con una protección adecuada para enfrentar cualquier imprevisto.
En este sentido, inter.mx, la plataforma digital de seguros, recomienda verificar que sus pólizas estén diseñadas para acompañarte con coberturas clave como:
• Daños materiales: Cubre reparaciones al vehículo por impactos, además de daños causados por encharcamientos, inundaciones o tormentas de granizo.
• Responsabilidad civil y gastos médicos: Protege al conductor y a los pasajeros ante lesiones o daños a terceros, con cobertura médica en caso de accidente.
• Asistencia vial: Incluye apoyo en carretera como paso de corriente, envío de gasolina, cambio de llantas o servicio de grúa, disponible 24/7.
• Defensa legal y protección ante robos o colisiones: Acompañamiento jurídico si lo necesitas y respaldo económico en caso de robo total o choques.
Con la temporada de lluvias, los imprevistos al volante pueden presentarse en cualquier momento. Tener la protección adecuada no solo te ayuda a estar preparado, sino que te da la tranquilidad para manejar con confianza y concentración. Lo más importante es llegar seguro a tu destino, sin importar lo que traiga el clima.