Cuando se habla de hacer crecer los recursos económicos, se cree que las inversiones solo están disponibles para cierta clase social o que se necesita mucho dinero para llevar a cabo esta clase de maniobra. Sin embargo, es una creencia equivocada; de ahí que romper con este paradigma es un reto que enfrentan las instituciones financieras con operación en México en la actualidad.
Así lo declaró Gerardo Obregón, director general de Prestadero.com, quien añadió que colocar dinero en una institución hoy ya no se limita a un grupo exclusivo de personas, pues aquellas que lo hacen son como todos; o sea, cualquiera puede aprender a hacer crecer su dinero independientemente de su trabajo, ingresos o estilo de vida. Por consiguiente, dijo, se debe eliminar la idea de que sienten que no tienen dinero para invertir, de perderlo todo si lo hacen, y de creer que la información es confusa.
“Actualmente y gracias a los avances tecnológicos, es más sencillo y accesible que nunca el mercado de las inversiones para cualquiera que tenga interés y ganas de poner su dinero a trabajar, y sobre todo de manera segura en una fintech”, abundó Obregón.
El director general de Prestadero.com explicó que en 2020 por cada 10,000 personas de la Población Económicamente Activa (PEA), únicamente 35 invierten directamente en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV); mientras que en Estados Unidos por cada 100 personas de la PEA, invierten 60.
De igual modo, Obregón subrayó que existen varias opciones en el mercado de bajo y alto riesgo para empezar a invertir. Por ello, apuntó, lo primordial en esta materia es:
Informarse sobre la opción de inversión. No hay que ser un experto, pero conocer un poco cómo funciona, lo dejará más tranquilo y le ayudará a tomar mejores decisiones. Pregunte y compare sobre las diversas opciones para elegir la mejor alternativa financiera de acuerdo con su perfil de inversionista, y al capital que está dispuesto a poner a trabajar.
Aprender a diversificar. No invertir todo en un mismo lugar, busque siempre distribuirlo siendo consciente de que existen inversiones que conllevan un riesgo mayor que otras. Por ello se debe conocer lo mejor posible tanto los riesgos como las opciones de acuerdo con el mercado o segmento en el que busque invertir. Por ejemplo, 40 por ciento en acciones o fondos que contengan acciones, 20 por ciento en fondos de deuda gubernamental o Certificados de la Tesorería de la Federación (Cetes), 20 por ciento en deuda bancaria o corporativa (o fondos), y 20 por ciento en inversiones alternativas, como crowdfunding.
Contemplar la inversión en el plan financiero. Hay varias opciones de inversión, pero si no tiene sus objetivos claros y sus riesgos identificados no estará cómodo. Por ejemplo, si planea invertir para incrementar su patrimonio por un plazo de al menos cinco años, entonces cumpla este plazo, y el monto que destine mes con mes a la inversión, de esta forma generará un hábito y no se hará pesado no contar con ese dinero.
“Actualmente, el mercado financiero en México ofrece muchas alternativas para invertir su capital; por eso infórmese y compare antes de elegir alguna. Recuerde que no hay edad para comenzar, pero cuanto antes lo haga será mejor; por ello, si aún no tiene un plan de inversión, es un buen momento para comenzar y echarlo a andar. Puede buscar asesorías, pero, sobre todo, infórmese muy bien sobre el tema y verifique la información. Quien le brinde seguridad y confianza, es siempre una buena opción”, concluyó Obregón.