Diciembre es uno de los meses más demandantes para el bolsillo. Entre viajes, cenas, regalos, intercambios y eventos laborales, los gastos se multiplican sin que muchos lo noten. Según el estudio Compras de fin de año 2025 en América Latina, elaborado por Simon-Kucher, los mexicanos planean gastar en promedio 247 dólares por persona, la cifra más alta de la región.
El problema, según Miguel Ángel López, profesor de Finanzas de EAE Business School, es que solemos subestimar los “gastos silenciosos”. “Muchos cuentan solo regalos o cenas principales, pero olvidan compras pequeñas, transporte, propinas o eventos sorpresa”, explicó. A esto se suma la presión social, que en familias con menos ingresos puede llevar al uso de créditos rápidos y, con ello, al sobreendeudamiento.
La clave para evitarlo está en la anticipación y la claridad. El experto recomienda elaborar una lista completa de gastos -incluyendo los menores- y jerarquizar lo esencial.
López insistió en que el ahorro no debe sacrificarse: “Diciembre no es un mes extra; es un mes normal con gastos adicionales”. Sugirió destinar entre 20 y 25 por ciento del ingreso para celebraciones, dividido en regalos, cenas, viajes, eventos y un fondo de imprevistos. Si algo no cuadra, se ajusta la categoría, no el ahorro, y menos aún se recurre al financiamiento. Terminar el año sin deudas, revisar suscripciones y planear metas para 2026 ayuda a evitar que enero se convierta en un mes de estrés financiero.
