Propósito, salud mental y flexibilidad superan al dinero como principal motor de fidelización laboral

Por: Alma G. Yáñez Villanueva @pea_alma

En 2025, ofrecer un buen salario ya no es suficiente para retener al mejor talento. En un entorno laboral donde el cambio es constante y los modelos híbridos se consolidan, los profesionales están priorizando el bienestar emocional, la flexibilidad y el sentido del propósito. En este sentido, aquellas organizaciones que comprenden esta transformación están logrando equipos más estables, innovadores y comprometidos.

Una investigación de THT Multilatina revela que el 36 por ciento de los empleados latinoamericanos considera el salario emocional (como la flexibilidad, reconocimiento, oportunidades de crecimiento y sentido de pertenencia) como el factor más importante para comprometerse con una empresa. Le siguen el trato digno (19 por ciento) y la formación continua, lo que reafirma una demanda de condiciones más humanas y coherentes con los valores personales. 

En México, esta tendencia es aún más clara, un sondeo realizado por Up Sí Vale encontró que el 77 por ciento de los colaboradores considera el salario emocional como un aspecto clave en su satisfacción laboral.

Esta transformación de prioridades también se alinea con el enfoque académico de instituciones como BIU University Miami, que ha identificado que las nuevas generaciones no solo buscan progresar profesionalmente, sino también pertenecer a entornos laborales humanos, flexibles y coherentes con sus valores personales.

Además, según un informe de McKinsey, los modelos de trabajo híbridos que promueven la autonomía y el balance vida-trabajo no solo retienen talento, sino que pueden incrementar los ingresos corporativos hasta en un 35 por ciento. Pero los beneficios no se limitan al formato de trabajo: la motivación laboral ahora se construye desde lo emocional.

En este contexto, las habilidades blandas se han consolidado como el verdadero diferencial de las organizaciones exitosas. De acuerdo con un estudio conjunto de Harvard University, Carnegie Foundation y Stanford Research Center, el 85 por ciento del éxito profesional proviene de competencias como la empatía, la comunicación y la adaptabilidad, mientras que solo el 15 % se atribuye a habilidades técnicas.

Esta visión la refuerzan cifras del informe Human Capital Trends 2023 de Deloitte, donde se indica que las organizaciones que priorizan un enfoque basado en habilidades (especialmente las blandas) son un 57 % más ágiles y resilientes ante los cambios del entorno.

Además, un reciente estudio internacional reveló que el 97 por ciento de los empleadores considera que las habilidades blandas son tan importantes o más que las técnicas, y que el 89 % de los errores en contratación se deben precisamente a la falta de estas competencias. Desde BIU University, se reconoce a las habilidades blandas como la base del liderazgo humano. En su artículo “Soft skills: un activo laboral muy demandado”, destacan la creatividad, adaptabilidad, inteligencia emocional, colaboración y persuasión como habilidades vitales.

Califica este artículo

Calificación promedio 0 / 5. Totales 0

Se él primero en calificar este artículo