El huracán Florence azotó los estados de Carolina del Norte, Carolina del Sur y Virginia en Estados Unidos, ocasionando la muerte de 33 personas y daños económicos cuantiosos que resarcirán las compañías de seguros en el caso de las afectaciones debidamente cubiertas.
Las pérdidas económicas provocadas por el desastre natural podrían sumar entre 2,500 millones y 5,000 millones de dólares, de acuerdo con la empresa Willis Towers Watson, firma especializada en consultoría global y correduría.
La firma precisa en un documento que aún están en proceso de evaluación las casas destruidas y las inundaciones que dejó a su paso el huracán Florence.
A pesar de las elevadas pérdidas provocadas por el meteoro, el subdirector general de Willis Towers Watson, Juan Carlos Tárraga, dijo que debido a los últimos cambios que sufrió la estructura de la tormenta y como resultado de la disminución de la velocidad del viento se rebajaron las estimaciones de pérdidas aseguradas respecto a las iniciales.
Antes de que Florence tocara tierra, la calificadora Fitch Ratings consideraba que este huracán podría generar decenas de miles de millones de dólares en pérdidas aseguradas, lo cual no ocurrió.
Tárraga explicó que la disminución en la velocidad del viento ocasionó que los mayores daños tuvieran como origen las fuertes inundaciones que, como se sabe, provocan menos destrucción que el viento; no obstante, recordó que en ambos riesgos hay cobertura de seguros.
Frente a este tipo de fenómenos naturales, cada temporada más potentes y frecuentes, Tárraga recomendó que las empresas de todos los tamaños, y especialmente las que tienen mayor exposición a catástrofes, “comiencen el proceso de renovación de su seguro con anticipación, de modo que garanticen que la información que ofrecen sea completa, actual y precisa”.