Reaseguro requiere experiencia en riesgos y solidez financiera

Por: Alma G. Yáñez Villanueva @pea_alma

El entorno del mercado para las reaseguradoras sigue siendo prometedor, pero enfrenta una mayor incertidumbre. Asimismo, se espera que en el período 2023-2025, el mercado mundial de reaseguros experimente un ligero repunte en el crecimiento anual promedio real, algo por debajo de los niveles de 2020-2022. Se prevé que el crecimiento futuro será mayor en Asia-Pacífico y América Latina, revela un comunicado de Munich Re.

La información añade que, según datos de AM Best y Guy Carpenter, se prevé que el capital de reaseguro, después de disminuir el año pasado, aumente nuevamente a 461,000 millones de dólares en 2023 (2022: 434,000 millones de dólares, ajustado por los efectos sobre el capital derivados de las tasas de interés más altas). El capital de reaseguro es un indicador de la capacidad de reaseguro disponible. El mercado de transferencia alternativa de riesgos se ha mantenido prácticamente sin cambios, con un volumen de capital invertido de alrededor de 100,000 millones de dólares. Dentro de este mercado, se ha producido un cambio claro hacia los bonos cat.  

El reporte indica que sigue siendo particularmente importante que las aseguradoras y reaseguradoras sean precisas en sus estimaciones sobre cómo se desarrollará la inflación; y destacan que, en el caso de 2021 y 2022, la inflación fue casi el doble de lo esperado. La inflación ahora ha comenzado a caer nuevamente. 

Sin embargo, es probable que la inflación promedio de los precios al consumidor en los países industrializados siga estando por encima de los objetivos de los bancos centrales de alrededor del 2 por ciento en los próximos años, incluso en el escenario base, y por lo tanto muy por encima de las tasas de inflación observadas en años anteriores. 

La incertidumbre involucrada es considerable: tasas de inflación apreciablemente más altas son un escenario de riesgo mucho más probable que aumentos de precios más bajos y menos pronunciados.  

Al mismo tiempo, muchos riesgos están cambiando, un ejemplo de ello son los peligros naturales. Las fuertes tormentas con tornados y granizo en Estados Unidos provocaron pérdidas por valor de 35,000 millones de dólares en el primer semestre de 2023, de los cuales 25,000 millones estaban asegurados. 

Estos órdenes de magnitud son similares a los que se esperan de un huracán importante y prácticamente se han convertido en la norma y no en la excepción. Una gran cantidad de investigaciones científicas indican que el cambio climático está aumentando la frecuencia de tormentas eléctricas severas. 

Los datos sobre pérdidas de mercado muestran una tendencia al alza en las pérdidas derivadas de tales eventos, incluso en Europa, y de otros peligros que no son picos, como incendios forestales e inundaciones repentinas en muchas regiones del mundo.

“Dado el desarrollo dinámico del entorno del mercado y la evolución del panorama de riesgos, necesitaremos aumentar nuestras inversiones para garantizar y ampliar la (re)asegurabilidad”, detalló Thomas Blunck.

Califica este artículo

Calificación promedio 0 / 5. Totales 0

Se él primero en calificar este artículo