Los desastres naturales que azotaron al orbe durante el primer semestre de 2020 causaron pérdidas económicas totales estimadas en 75,000 millones de dólares; es decir, 23 por ciento menos que el promedio de 2000-2019, el cual fue de 98,000 millones de dólares. En tanto, las pérdidas aseguradas se estimaron en 30,000 millones de dólares, ocho por ciento más que el promedio de los últimos 20 años, que fue de 28,000 millones de dólares, de acuerdo con el Resumen de catástrofes globales: primer semestre de 2020, elaborado por AON, firma especialista en servicios de gestión de riesgo, seguros y reaseguros, recursos humanos y consultoría.
El informe de AON refiere, sin embargo, que las cifras totales difundidas son preliminares y cambiarán a medida que continúen desarrollándose pérdidas.
El análisis de la consultora británica detalla que los desastres naturales fueron responsables de aproximadamente 2,200 muertes durante el primer semestre de 2020, cifra por debajo del promedio a largo plazo (1980-2019) de 39,800 y la media de 7,700. Las inundaciones fueron el peligro natural más letal durante dicho período, ya que produjeron 60 por ciento del número de muertos.
AON revela que del total de 207 eventos de desastres naturales globales registrados por Impact Forecasting (que proporciona información en tiempo real sobre eventos catastróficos) para el primer semestre de 2020, estuvieron por encima del promedio de 20 años, que es de 184 y la media, de 189. Asimismo, destaca que hubo al menos 20 eventos “económicos” separados de miles de millones de dólares durante la primera mitad del año, encabezados por Estados Unidos, con 10 eventos; Asia Pacífico (APAC), con cinco; Europa, Medio Oriente y África (EMEA), con tres; y América, con dos.
El estudio de la consultora subraya que el ciclón Amphan, que mató a 133 personas en India en mayo, fue el evento económico más costoso del primer semestre de 2020, provocando un estimado de 15,000 millones de dólares en pérdidas por daños directos. Además, un evento meteorológico severo en Estados Unidos ocurrido del 10 al 14 de abril y que cobró la vida de 38 personas, fue el suceso asegurado más costoso, con reclamos por un total de casi 3,000 millones de dólares.
Por otro lado, el reporte cita que los primeros seis meses del año estuvieron marcados por muchos desastres de pequeña y mediana escala, que afectaron a un gran número de comunidades a nivel mundial. Desde una perspectiva de peligro, hubo un número inusualmente bajo de terremotos significativos en el primer semestre de 2020.
Al respecto, Steve Bowen, director y meteorólogo del equipo de pronóstico de impacto en el negocio de soluciones de reaseguro de AON, dijo: “La primera mitad de 2020 fue desafiante en varios frentes dados los efectos continuos de la COVID-19 y una serie de eventos meteorológicos y relacionados con el clima en todo el mundo. Gran parte de las pérdidas asociadas a los desastres naturales tuvieron como origen las tormentas convectivas severas”.
Y finalizó: “Además, tuvimos un récord de 10 eventos individuales relacionados con tormentas que tuvieron más de mil millones de dólares en pérdidas económicas solo en Estados Unidos durante los primeros seis meses del año. Australia y Canadá se enfrentaron cada uno a fuertes tormentas de granizo que provocaron daños por un valor de miles de millones de dólares. Los ciclones tropicales de principios de la temporada, como Amphan en India y Bangladesh, los incendios forestales en Australia, las tormentas de viento en Europa y el calor sin precedentes en el Círculo Polar Ártico también fueron notables en la primera mitad del año. Si bien las pérdidas del primer semestre no muestran una correlación directa con el segundo semestre del año, el pico inminente de la temporada de huracanes en el Atlántico, ya que se prevé que lleguen las condiciones de La Niña, solo aumenta la necesidad de tener en cuenta el riesgo de amenazas naturales en los próximos meses”.