Sistemas para prevenir enfermedades, movilidad compartida y consumidores precavidos, la vida post COVID-19

El Asegurador

 

La pandemia provocada por la COVID-19 es un punto inflexión en la historia de la humanidad y se perfila como un punto de no retorno, lo que generará la inminente consagración de un nuevo estilo de vida, en el que se reformularán los sistemas sanitarios para afrontar nuevos riesgos de salud universal, habrá una mayor demanda de la movilidad compartida y emergerá un consumidor que será mucho más precavido y menos espontáneo.

El anterior pronóstico es parte de un estudio elaborado por Ray Hammond, experto en el análisis de tendencias que marcarán el futuro,  para Allianz Partners, titulado La vida post COVID: Salud, Movilidad, Viaje y Hogar.

De acuerdo con la investigación, la COVID-19 aceleró el aterrizaje de los hogares inteligentes y generó un nuevo rol en la vida de la sociedad. En tal sentido, añade, antes de la pandemia, trabajar desde casa era una excepción; sin embargo, afirma, se convertirá en la norma en todos aquellos trabajos que lo permitan.

“El hogar del futuro se transformará asimismo en una verdadera fortaleza digital, visto que incluirán  sensores inteligentes, detectores, puntos de entrega segura del correo, e incluso dispositivos de monitorización de la salud integrados, por medio de equipos de diagnóstico electrónico y aplicaciones móviles; de tal suerte que se garantizará la seguridad y la independencia de todos los que los habitan”, anota la investigación.

Sociedades más resilientes a los embates sanitarios

En otro punto de la investigación difundida por Allianz Partners, se refiere que las sociedades, así como los sistemas de salud, serán reformados a raíz de la COVID-19; por lo que, destaca, estarán mucho mejor preparados para afrontar un nuevo riesgo de salud universal.

La investigación precisa que será vital que los gobiernos aumenten el gasto en salud, sin perder de vista que será obligatorio que los países incrementen la localización de cadenas de abastecimiento sanitario para asegurar el rápido acceso a medicinas y equipos de atención médica.

Allianz Partners pronostica que las secuelas de la pandemia asociadas a la salud mental se prolonguen más tiempo que la propia COVID-19; así que, agrega, es muy factible que los profesionales de la salud mental continúen haciendo uso en el futuro de la telemedicina para proporcionar diferentes tipos de tratamientos.

El traslado mutará

La investigación pronostica que más allá de que se comercialicen dispositivos como los cubrebocas inteligentes, un artículo de uso personal innovador que es capaz de identificar a las personas que padezcan de enfermedades como la COVID-19, el volumen de pasajeros en trenes y sistemas de transporte masivo se reducirá.

“Durante los confinamientos derivados de la COVID-19, un gran número de personas descubrió las facilidades de realizar su compra por medio del comercio electrónico; por ello, la mayoría de quienes trabajan desde sus hogares se replantearán si merece la pena tener un automóvil. En concreto, se incrementará el número de alquileres de coches por tiempo limitado, siendo una cifra superior al de propietarios de vehículos. También se estima que aumente el número de usuarios de plataformas de movilidad compartida”, apunta el diagnóstico de Allianz Partners.

El ser humano no se comportará igual

Casi al término de la investigación, se analiza la forma en la que se alterarán los patrones de consumo, como consecuencia de una pandemia que paralizó el tráfico aéreo y marítimo y que puso en jaque a sectores productivos como la hotelería y los restaurantes.

Por lo anterior, la firma concluye que en la era post pandemia, los consumidores serán mucho más precavidos, menos espontáneos y no dejarán a un lado las medidas de protección contra el virus SARS-CoV-2. 

“Los viajeros, por ejemplo, cambiarán sus hábitos, incluyendo el uso de mascarillas en todo el trayecto y despidiéndose de sus familiares fuera de instalaciones como los aeropuertos. Además, las aerolíneas eliminarán la posibilidad de viajar con equipaje de mano para acelerar el embarque y reducir el riesgo de contagio; por lo que es factible que disminuyan los servicios de comida y bebida a bordo. En cuanto a las reuniones comerciales, las exposiciones y los eventos deportivos internacionales, será complejo que  recuperen las cifras previas a la pandemia en un futuro próximo”, finaliza Allianz Partners.

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