De acuerdo con la Encuesta de Bienestar Global 2022-2023 elaborada por AON, firma global líder en servicios profesionales, preocuparse por el bienestar de los empleados puede mejorar de 11 y hasta 55 por ciento el rendimiento de una empresa, pues se ha comprobado que existe una relación entre el bienestar y una vida laboral sostenible con el empeño que los colaboradores ponen en su trabajo.
Entre más altas sean las calificaciones de un empleador en cuanto a los diferentes servicios de bienestar que le otorga a sus empleados -horarios flexibles, bonos por participación, libertad de hacer home office, etcétera- mejores serán sus resultados de resiliencia, agilidad y pertenencia de la fuerza laboral, con efectos positivos en los buenos resultados de la empresa.
De las más de 1,100 organizaciones encuestadas por AON, casi dos tercios informaron que el bienestar de sus empleados es algo prioritario desde 2020; y el 87 por ciento de ellas ha tenido, por lo menos, una iniciativa de bienestar desde ese año, comparado con el 55 por ciento que las han tenido también en ese año.
Asimismo, la investigación afirma que el bienestar es un componente clave de la estrategia de fuerza laboral de una organización. Integrado como un enfoque de personas y desempeño, el marco para el bienestar equilibra los recursos apropiados, las oportunidades y el compromiso necesarios para lograr una salud, resiliencia y sostenibilidad óptimas para el individuo, el equipo, el liderazgo, la organización y la comunidad.
Stephanie Pronk, vicepresidente senior de Soluciones de Salud de AON, destacó que a pesar de que las empresas se enfrentan a una volatilidad e incertidumbre cada vez mayores en forma de inflación, una pandemia global, cambios en los patrones de la fuerza laboral y conflictos geopolíticos, la última Encuesta de Bienestar Global demuestra que, ahora más que nunca, los empleadores aún se enfocan en el bienestar.
De igual manera, las empresas están construyendo fuerzas de trabajo resilientes al aumentar su compromiso con el bienestar de los empleados tanto en el apoyo como en la inversión financiera, lo que también ayuda a atraer y retener talento.
“El bienestar está lejos de ser un problema de nicho: los programas de este tipo están diseñados para abordar las diversas necesidades de los empleados y pueden tener un grandes efectos en una organización”, concluyó la experta.